Exposición fotográfica "1989: Bucarest, Praga, Varsovia"

El 16 de diciembre de 2019 se cumplen 30 años desde los trágicos eventos que llevaron al colapso del régimen comunista en Rumanía.

La exposición fotográfica "1989: Bucarest, Praga, Varsovia" que se podrá ver en el Museo de la Universidad de Valladolid (MUVa) hasta el 24 de enero de 2020, en la sala de exposiciones del Edificio Rector Tejerina consta de 51 de fotografías de Rumanía, República Checa y Polonia, en las que se recogen los momentos sociales de sus transiciones políticas que hicieron posible sus incorporaciones en la Unión Europea.

El Museo de la Universidad de Valladolid ha organizado esta exposición fotográfica en colaboración con el Instituto Polaco de Cultura, el Centro Checo y el Instituto Cultural Rumano.

Comisarios de la exposición: Mirosława Kubas-Paradowska, Maria Floarea Pop y Stanislav Škoda.

Dirección y horario:

Edificio Rector Tejerina, plaza de Santa Cruz, 6. 47002, Valladolid

Lunes a Viernes laborables: 10 a 14h y 18 a 21h

1989: Bucarest - Fotografías de Florin Andreescu

Florin Andreescu (n.1962), es fotógrafo, cineasta, editor. Durante los años 80 y a principios de los 90, documentó la vida cotidiana de los rumanos, desde un enfoque personal, inmortalizando escenas típicas de aquellos tiempos difíciles, a través de fotografías que no se podían enseñar y publicar en aquellos tiempos, cuando la censura era muy estricta y la “denigración de la realidad socialista” se castigaba con penas de prisión.

Flashback es un mosaico en blanco y negro de la historia reciente de Rumanía. Las fotografías presentan, desde una perspectiva exenta de prejuicios, el turbio ambiente previo a la situación que llevaría al derrocamiento del régimen comunista, así como los contrastes que marcaron la vida cotidiana del periodo 1989-1990, y sobre todo las restricciones y prohibiciones de todo tipo que después de décadas de terror hicieron que “la polenta explotara” (polenta –gachas de harina de maíz, consumidas en los pueblos en lugar de pan), expresión que gritó un revolucionario desde el balcón del Teatro de la Ópera de Timișoara, la ciudad donde se encendió la chispa de la Revolución Rumana.
Las fotografías seleccionadas muestran escenas reales, imágenes de lo más diversas, desde mercadillos y rastros al aire libre a enlodadas calles de las ciudades en construcción, desde niños sin techo (drogadictos de los años 90 que consumen sustancias alucinógenas) a grupos de pequeños “Halcones de la Patria” (en rumano Şoimii Patriei –una organización comunista de Rumanía para los niños de 4 a 7 años, fundada en 1976 siguiendo el modelo del movimiento “Octubrista” de la Unión Soviética), desde trabajos en fábricas y horas extras a favor de la comunidad a hoteles de lujo y lugares de diversión para turistas extranjeros, desde comidas en cantinas de fábricas a vacaciones en balnearios, desde ferias y campamentos de gitanos al ejército, desde tabernas hasta camas de hospitales, etc. No faltan las manifestaciones centradas en el culto de la personalidad y las obras para el acondicionamiento de las construcciones urbanas (un verdadero desastre para el patrimonio arquitectónico, en muchos casos arrasado por completo), verdaderos modelos de arquitectura de inspiración soviética.